Aparentemente, Twitter tiene mucha importancia para los kuwaitíes; un caso tras otro es llevado ante los tribunales debido a determinados tuiteos. Hace algunos meses, un columnista fue encarcelado por sus tuiteos en contra del chiismo y el año pasado hubo dos casos similares, en los cuales el chiita Nasser Abul y el sunita Mubarak Al-Bathali pasaron meses en prisión por los tuiteos que habían publicado.
A fines de marzo, luego de investigar a un usuario de Twitter por una etiqueta, esta red social fue tomada por los furiosos tuiteos de Hamad Al-Naqi, un joven chiita de Kuwait conocido por su apoyo a la revolución de Bahréin. Al-Naqi fue acusado de insultar al profeta Mohammed y a una de sus esposas, Ayesha.
A pesar que negó las acusaciones fue arrestado y se está realizando una investigación mientras que él está detenido antes del juicio, una ley que ha sido criticada porque permite a la fiscalía detener a alguien durante semanas sin acceso a juicio. Él declaró que su cuenta ha sido hackeada, que es religioso y que nunca insultaría al profeta Mohammed.
A pesar que los tuiteos pueden ser considerados como un ataque al Islam, los sunitas lo ven como un ataque del chiismo contra el Islam sunita. El miércoles, los kuwaitíes protestaron en la plaza Erada frente al parlamento contra Al-Naqi y pidieron por su muerte quemando la bandera iraní [video] para demostrar que el chiismo es solo leal religiosa y politicamente a Irán.
El ministerio de interior de Kuwait expresó que aquellos que hayan quemado la bandera serán interrogados porque a su país le interesa conservar su relación con la República Islámica de Irán. Los tuiteos fueron eliminados de la cuenta de Al-Naqi pero esto es una captura de pantalla del tuiteo más polémico que circula en Twitter y en otros sitios web. El mismo dice:
Nunca vi un Profeta que no se sintiera avergonzado de Dios pero si del apestoso Othman [compañero del Profeta] y que haga películas pornográficas con Ayesha.
Miles de tuiteos de todos los países del golfo maldijeron, insultaron y pidieron la muerte de Al-Naqi. A pocas de estas personas les importó el tuiteo que un hacker hizo utilizando la cuenta de Al-Naqi que decía: «Gracias a Alá hemos controlado esta cuenta y este será el principio del fin para el chiismo..su hermano: el vencedor del chiismo @Al5aTab»:
El siguiente tuiteo fue uno de los más retuiteados. Hasta el momento en que se escribió este artículo, fue retuiteado mas de 800 veces.
Sin embargo, toda la historia no tiene sentido. Siguiendo las noticias y los tuiteo, algunos dijeron que otra cuenta había sido creada con la misma biografía y la misma foto para tuitear insultos y otros afirmaron que la cuenta había sido hackeada. Al ver su cuenta, no existen ni los insultos ni los mensajes del hacker. Hace dos días Al-Naqi tuiteó:
En este video (cargado por zoominalwatan), los manifestantes kuwaitíes gritan «no queremos ninguna ley, lo queremos muerto».
Hasta ahora, muchos miembros del parlamento hicieron afirmaciones en contra de Al-Naqi y pidieron un «castigo severo» para cualquier persona que ofenda a Dios y al Profeta. Más de 30 (de un total de 50) miembros del parlamento hablaron en contra de Al-Naqi, y en este video el Dr. Faisal Al-Musalam, miembro Islámico del parlamento y ex profesor de la universidad de Kuwait, anuncia en una conferencia de prensa que se propondrá una ley en Kuwait que sentencie a pena de muerte o prisión perpetua a cualquiera que insulte al Profeta