Amina, una menor de 16 años, natural de Larache al norte de Marruecos, eligió quitarse la vida bebiendo matarratas el pasado sábado antes que seguir estando casada con su violador. De acuerdo con al-Masa'a [ar], Amina fue violada por un hombre diez años mayor que ella, cuando tenía apenas 15. Para preservar el «honor de la familia», se acordó que Amina se casara con su violador. Un juez aprobó la boda.
De acuerdo con el mismo periódico, Amina tomó el veneno mientras estaba en casa de su marido (y violador). Cuando éste se dió cuenta de lo que pasaba, la llevó a casa de su familia. Por el camino no paró de pegarle, dijo Amina a su familia unas horas antes de su muerte.
La historia de Amina ha afectado e indignado profundamente a los marroquíes en la red que han estado utilizando la etiqueta #RIPAmina para lamentar la muerte de la joven. Algunas de las reacciones han sido las siguientes:
@marihaep: @Un_Marocain Ne prenons pas nos rêves pour D réalités, personne ne sera jugé, personne ne payera pour son viol, encore – pr sa vie #RIPAmina
@Un_Marocain: En tant que marocain, je me sens plus coupable que triste pour ce qui est arrivé à cette petite fille. #RIPAmina #Maroc
@nadalouis: No quiero vivir en un mundo donde una joven tenga que elegir entre casarse con su violador o quitarse la vida #RIPAmina
@mahamiou: ¿Cuántas Aminas hay ahí fuera, forzadas a casarse con sus violadores? #Morocco #RIPAmina
@mahi_elbarrad: عندما ينظر العالم العربى للمراة على انها مخلوق مثل الرجل له كافة الحقوق وكامل الاحترام هنا فقط تنجح ثورته #RIPAMINA
@citizenkayen: La famille, la société et la justice ont donné au violeur un véritable RIP: Rape In Peace :( #RIPAmina
@Tindars: Et puis comme d'habitude nos Tweets ne changeront absolument rien dans cette histoire. #RipAmina
‘Amina es mi Bouazizi’
En homenaje a Amina, el bloguero marroquí Mehdi B. Idrissi escribió un artículo con el título Amina es mi Bouazizi [en]. El artículo hace referencia a Mohammed Bouazizi, el vendedor callejero de Sidi Bouzid, Túnez, que encendió la chispa de la protesta contra el abuso policial, que desencadenó una ola masiva de protestas que desembocaron, a su vez, en la revolución tunecina y la caída del régimen de Ben Ali.
La inmolación desesperada de Bouazizi trajo el cambio a Túnez, pero ¿provocará el suicidio de Amina el cambio en Marruecos y en el mundo árabe, donde la cultura está completamente dominada por los hombres?
Mehdi escribe [en]:
Bouazizi puede que hiciese despertar una revolución política, pero Amina ha despertado en mí el sentimiento humanitario, que tanto tiempo había estado dormido. Hay miles de jóvenes como ella en nuestra tierra, la mayoría obligadas a guardar silencio por la fuerza o a base de amenazas. Mientras que se concentraban en localizar a Joseph Kony en los bosques de Uganda, les han robado a sus niños en sus propias tierras. Podría sentarme aquí todo el día y hablar de mi desesperación, llorando la muerte de la que cualquier día podría ser mi hija o mi amiga. Eso no cambiaría nada. Si no hacemos esto juntos, si no luchamos por cambiar la mentalidad marroquí estaremos estancados siempre, y no habrá posibilidad alguna para el progreso.
Para ver otras reacciones en la red en inglés, francés y árabe visita este Storify creado por el autor de Global Voices Hisham Almiraat.