Cuba: El gobierno cambió las restricciones de viaje a los ciudadanos

El 16 de octubre, el gobierno cubano anunció su plan para eliminar las polémicas restricciones de viaje de los ciudadanos de Cuba. Durante décadas los cubanos han necesitado solicitar permiso del gobierno para salir del país. De acuerdo con la Gaceta Oficial de Cuba, el registro público de reformas jurídicas y normativas, se eliminará este requisito a principios de enero de 2013.

En Twitter, algunos usuarios respondieron con euforia. Francisco Vergara (@vergaraf1) tuiteó:

Celebro la decisión del gobierno de #Cuba de eliminar el permiso de salida a sus ciudadanos. Libre albedrío puro.

Luis A. Gonzalez (@3L_V0C3R0) acogió con agrado la noticia y apuntó que la política probablemente atraería un influjo de cubanos hacia Miami:

«Cuba elimina permiso de salida» A partir del enero 14 del 2013 los Cubanos podrán salir libremente de su país. Ahora es q Miami será Cuba

Pasaporte cubano. Imagen de Wikimedia – dominio público.

Bajo el proceso actual de solicitud de viaje, el individuo debe entregar mucha documentación que describa la naturaleza de su viaje y conseguir una carta oficial de invitación de la persona o institución de fuera del país que lo acoja durante el tiempo que esté fuera. Los defensores de los derechos humanos y los líderes de gobierno rutinariamente clasifican esta política como una violación de los derechos humanos al movimiento. Aunque a miles de cubanos se les concede todos los años el permiso de viaje, se tiene la imagen [en] de que el permiso de viaje se concede solo a los ciudadanos que tienen una «buena» afinidad política con el gobierno.

Mientras que la nueva política elimina los pesados y caros obstáculos burocráticos para viajar, el texto de la ley indica que el gobierno seguirá teniendo criterio a la hora de elegir quién puede y quién no puede viajar a través del proceso de solicitud del pasaporte. Martí Noticias describe cómo el gobierno puede negarse a conceder el pasaporte a cierta clase de profesionales (para evitar la «fuga de cerebros») y por motivos relacionados con la seguridad y defensa nacional.

La destacado bloguera y residente en La Habana, Yoani Sánchez escribió:

[A]hora en la propia confección y validación del pasaporte se definirá quiénes lograran franquear las fronteras nacionales y quiénes no.
[…]
esta no es la nueva ley de migración que estábamos aguardando. Demasiado limitada, demasiado estrecha. Pero al menos ha quedado por escrito una legalidad a partir de la cual ahora empezaremos a exigir, protestar, denunciar.

Marta López [@aircag] expresó una frustración similar en Twitter:

#Cuba No se necesitara permiso de salida pero el gobierno tiene el derecho de no otorgarte el pasaporte si lo estima pertinente.

El investigador en tecnologías de EE. UU. Larry Press [en], que se centra en la infraestructura de Internet en Cuba, escribió:

Es fácil imaginarse a estas advertencias para denegar el pasaporte a gente como blogueros disidentes, profesionales de las redes y estudiantes y profesores de informática. Uno puede incluso imaginarse flujos de información más libres y bienes bienes de la tecnología de la información – en particular entre Cuba y EE. UU.

Los medios principales también comentaron los efectos que la reforma supondría en países como Estados Unidos y Rusia, ambos con excepciones especiales en sus políticas de inmigración para los de nacionalidad cubana. En Estados Unidos, por la Ley de Ajuste de refugiados cubanos de 1966 [en], los cubanos pueden obtener la residencia permanente en Estados Unidos tras pasar un año en el país.

Esta no es la primera vez que el gobierno cubano cambia las restricciones de viaje a los ciudadanos. En el Éxodo de Mariel de 1981 y la Crisis de los Balseros [en] de 1994, se les permitió a los cubanos abandonar el país y lo hicieron en masa. En ambos casos, los historiadores vieron estos cambios temporales en la política de viaje como intentos del gobierno de Castro de permitir abandonar el país a los ciudadanos descontentos, un movimiento que en teoría disminuía la presión del gobierno al cambio de las políticas que limitan los derechos civiles, políticos y económicos. Mientras que muchos medios han hecho comparaciones entre estos eventos y la situación actual, no está claro si la decisión de la semana pasada se puede situar en la misma categoría.

El experto en economía cubano Phil Peters [en] reconoció algunos de estos puntos, pero caracterizó la política como un paso positivo que a la larga mejoraría las vidas de las familias que están divididas entre Cuba y otros países y que permitirían mayor intercambio de conocimiento e ideas, así como de capital, entre los cubanos y el resto del mundo.

Hoy parece ser que todo el mundo apuesta que Cuba será más fuerte con una política de inmigración más normal y moderna – y que muchos cubanos, ya que tienen la libertad de ir y venir, querrán visitar a su familia, ver el mundo y luego volver a casa.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.