Alrededor de las 12:30 am del viernes 23 de octubre, estalló la refinería petrolera Gulf (Compañía Petrolera del Caribe -CAPECO, por su nombre en inglés) en Bayamón (en el área metropolitana), Puerto Rico. Desde ese momento, cerca de 20 tanques han explosionado, el fuego sigue ardiendo aunque ha sido contenido, y una inmensa e interminable torre de humo cubre el cielo. Se ha reubicado a más de 1,000 personas que viven en los barrios circundantes y se ha declarado en estado de emergencia a cinco municipalidades. Activistas y científicos han advertido acerca de las devastadoras consecuencias ecológicas de este desastre, y sobre cómo afectará a la salud de las personas. Los líderes comunales de los barrios vecinos han estado advirtiendo al gobierno durante años acerca de las consecuencias ambientales y de salud de las personas que viven cerca de una refinería de petróleo.

Todavía se investigan las causas de la explosión.

Video de la explosión publicado en YouTube por ZuperJ.

En Haciendo punto en otro blog, el periodista y blogger Carmelo Ruiz comenta:

La noche del jueves, la refinería de petróleo Gulf, en el pueblo cercano de Cataño, estalló. La explosión y la onda expansiva se sintió a más de treinta kilómetros de distancia. Era un sonido como nada que hubiera escuchado antes en mi vida (de hecho, la onda expansiva abrió la puerta de mi dormitorio). En los cuatro o cinco segundos que siguieron a la explosión, la bola de fuego era tan brillante como el sol de las tres de la tarde. El fuego sigue ardiendo, la columna de fuego es algo nunca antes visto en Puerto Rico.

Imagen del túnel de humo causado por explosión. Foto de Alberto Marty

A Ivone Acosta, historiadora y blogger, también la afectó la explosión, como lo expresa en Sin mordazas:

No me atrevo salir. Ya dos amigas que conocen mis alergias me llamaron para advertirme eso mismo, que no salga porque el aire contiene demasiados particulados peligrosos y que cierre todas las ventanas. Como quiera, no me interesa ver la histeria de la gente que por menos que eso se paniquean. Ya he visto comentarios en el periódico en línea acusando a “los socialistas de siempre”.

Para entender los comentarios de Acosta, se necesita algo de contexto. Hace muy poco, el 15 de octubre, hubo una huelga nacional en Puerto Rico. Funcionarios del gobierno han acusado a los manifestantes de ser terroristas.

En Observations from the “Island of Enchantment”, la blogger Adriana recuerda cómo se sintió cuando escuchó la explosión:

Ayer, cuando me desperté, escuché los sonidos distantes de helicópteros que volaban. Pensé, bueno, tal vez esté pasando algo en los proyectos de vivienda (caseríos). Un poco después, supe de la explosión. Aunque había ocurrido en Cataño, que está justo fuera de San Juan, vi las nubes negras desde mi casa. La magnitud de la explosión registró un 2.8 en la escala de Richter. Miles de personas tuvieron que ser evacuadas. Los agentes de orden público están investigando las causas de la explosión. No puedo imaginar a cuánto ascenderán las consecuencias ambientales, de salud y económicas. Afortunadamente, no se han reportado muertes.

En Twitter, la conversación se está llevado a cabo bajo la etiqueta #explosionpr. Para fotos ver El Difusor. Los medios alternos de información Diálogo y Prensa Comunitaria están ofreciendo cobertura minuto a minuto, igual que los medios convencionales Primera Hora, El Nuevo Día y El Vocero.

*Primer video de Luis Andrei Muñoz publicado en Flickr. Republicado bajo una licencia Creative Commons.