Angola: ¿Aumento en la violencia doméstica o solamente en la toma de conciencia?

Según varios medios de comunicación, los índices de violencia doméstica en Angola han aumentado considerablemente, pero, ¿en realidad han aumentado las cifras o simplemente hay una mayor toma de conciencia de tales crímenes? Aparentemente, en el 2008 hubo registrados cerca de 640 casos, 424 de los cuales se resolvieron a través de orientación profesional mientras que el resto tuvo que decidirse en los tribunales. Esas cifras son más altas que las estadísticas del 2007 que, como se menciona más arriba, reflejan el hecho que la mayoría de las víctimas temen informar sobre sus agresores a las autoridades. Es una buena señal: al denuciar más, las angoleñas dan un paso más en terminar con el maltrato que cometen sus esposos o novios.

Como era de esperarse, las historias son tristes. A veces terminan bien – cuando al maltratador se le pone detrás de las rejas y la mujer se libera de años de tortura y maltrato físico. Desafortunadamente, todavía hay algunas que terminan en desastre. Angola está llena de historias de mujeres que han muerto en manos de aquellos en quienes confiaban y amaban. Estos hombres, en cambio, creían que sus esposas o novias les pertenecían. En un arranque de celos las golpearon, invariablemente hasta la muerte.

Nely, ama de casa de 20 años, tuvo más suerte. El blog Diário da África blog [pt] nos cuenta un poco de su historia:

“Esta mañana, ella se tomó fotos de su espalda, brazos y piernas, están cubiertos con moretones negros y morados resultado de la paliza que recibió de su ex-esposo. Armado con un palo, Amâncio (ese es el nombre del agresor) calmó sus frustraciones con el mundo sobre Nely. La sesión de tortura empezó alrededor de las 6 am cuando ella recibió una llamada telefónica de un vecino que quería saber si podía llevarla al trabajo. El ex-esposo pegalón en un arranque de furia y celos, le pegó.
A pesar de la paliza, el agresor fue a quejarse de Nely a la policía, y la acusó de haberlo cortado con un cuchillo. Acá está la historia: “(Él) mismo se cortó con un cuchillo durante la confusión y después fue a la policía a denunciar a Nely. Ella camina con dificultad debido a un golpe en una de sus rodillas. Nely denunciará la agresión a través de la Organización de Mujeres Angoleñas – OMA, una organización ligada al gobierno angoleño que defiende los derechos de las mujeres. Por mi parte espero que Amâncio cumpla condena tras las rejas.”

Desafortunadamente, como ocurre en cierto grado en otras partes de este mundo, Angola no tiene un sistema legal fuerte que se dirija específicamente a la violencia doméstica, que permita que estos casos sean seguidos de cerca y lleven al posible arresto del agresor. El esposo de Nely, Amâncio, ha sido liberado y ha prometido seguir con su ola de terror. Ha destruido todos los documentos de Nely y ha mandado a su hija a que la críe su familia en São Tomé y Príncipe [pt]:

“Nada le pasó al ex esposo. Se fue calladamente, después de haberle pegado a Nely con un palo. Y amenaza volver. Ahora esperamos que la estación de policía de la mujer funcione. Que tengan un archvo con el caso en contra de este tipo, que se haga justicia por estas sesiones de golpes y que cumpla su sentencia en la cárcel. La evolución del caso es lo que [nos] preocupa . Comenzó gritándole a Nely, después hubo algunos puñetazos, después golpes, del tipo que la dejarían incapaz de levantarse del piso. Ahora hay un palo y un cuchillo. ¿Qué sigue?”

Probablemente la muerte, la de ella o la del agresor. Hay innumerables casos de mujeres que han matado a sus parejas para sobrevivir. Se debería dejar constancia que también hay informes de mujeres que maltratan hombres. Son pocos, pero existen. Miebtras tanto, está por redactarse pronto un proyecto de ley en violencia doméstica que, junto con varias actividades para la toma de conciencia en el tema, ofrecerá una nueva dirección a las mujeres angoleñas.

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