Joshua Foust reporta que la embajada de Uzbekistán en Londres ha denunciado de forma furiosa las historias que los niños están siendo usados (u obligados) a cosechar algodón y dice que el legado de autoritarismo-ineficiencia, desastre ambiental y el abuso del inocente dificulta seriamente el desarrollo del país.
Escrito por Adil Nurmakov.