Historias Acerca de Trabajo de Febrero, 2012
Túnez: Policía usa gas lacrimógeno y varas para dispersar protesta sindical
La policía usó gas lacrimógeno y varas para dispersar a los manifestantes que apoyaban al Sindicato General Tunecino para el Trabajo en la ciudad de Túnez el sábado 25 de febrero. El sindicato organizó una protesta en la que los manifestantes usaron lemas contra el gobierno y fueron atacaodos física y verbalmente por la policía.
Chile: Movimiento social en Aysén toma fuerza
Después que el año pasado la Región de Aysén se convirtiera en el centro de atención nacional por el controvertido proyecto hidroeléctrico Hydroaysén, hoy de nuevo las miradas se vuelven a esta zona de la patagonia chilena luego que se desencadenaran una serie de protestas que exigen una mejor calidad y más bajo costo de vida.
Alemania, Francia: Disparidades en políticas sobre la integración de estudiantes extranjeros
Elsa Doladille escribe [fr] en el blog de Educators Without Borders: «Mientras la ley Guéant en Francia intenta endurecer las condiciones para que los estudiantes extranjeros obtengan un permiso de trabajo, Alemania fomenta la integración de los estudiantes foráneos en su fuerza laboral.»
Italia: Más protestas contra la austeridad y la desinformación
Las medidas de austeridad implementadas en los países de la Unión Europea siguen encontrándose con la oposición popular, sobre todo en Italia, un país que ya ha sufrido tras años de incompetencia administrativa y problemas presupuestarios... por no hablar del importante déficit informativo.
Camboya: Desmayos masivos en fábricas textiles
La alianza Asia Floor Wage está organizando por primera vez un Tribunal popular en Camboya para defender un salario mínimo y unas condiciones dignas de trabajo para los trabajadores de las fábricas textiles. El tribunal tendrá lugar el 8 de febrero de 2012 en Phonm Penh.
Eslovaquia: El dilema «trabajo vs dinero»
El periódico SME publicó un artículo sobre un reciente experimento en la ciudad de Krompachy, en el este de Eslovaquia. A las personas desempleadas se les preguntó si participarían en un proyecto público de protección ante las inundaciones. En esta región con un alto nivel de desempleo, sólo 4 hombres jóvenes aceptaron. El resto rehusó, declarando que serían más pobres si realizaran ese trabajo.