La mayor cuenca hidrográfica de la región sur de Brasil está plagada de centrales hidroeléctricas.

Este artículo, escrito por el Coletivo Catarse, fue publicado originalmente por la Agência Pública el 30 de octubre de 2013 con el título Nem tão limpa, nem tão barata [pt].

“El pueblo brasileño necesita estar informado de que la energía limpia y barata de las hidroeléctricas no existe”, alerta el profesor Célio Bermann, de la Universidad de São Paulo. Recorrimos los caminos del río Uruguay, que divide los estados de Rio Grande do Sul y Santa Catarina, para averiguar del asunto. El resultado de dicho trabajo es el reportaje cinematográfico Barragem («Represa»), que se puede ver al final de esta entrada.

La mayor cuenca hidrográfica de la región sur del Brasil está plagada de centrales hidroeléctricas. Lo que era un complejo sistema de ríos en rápidos hoy es una secuencia, casi continua, de lagos largos y profundos. Y justamente en los últimos tramos en territorio nacional que todavía conservan las características originales del ambiente, el gobierno federal quiere autorizar la instalación de nuevos emprendimientos. Para ello no mide consecuencias, y pasa por encima de derechos sociales, económicos y ambientales.

Siempre sosteniendo la posición de que se trata de un recurso natural sustentable, el planeamiento de las concesiones de generación de energía se decide por el concepto de la que consigue vender la tarifa más barata. Defendiendo las hidroeléctricas como las que mejor responden a tales exigencias, Ronaldo Custódio, director de Ingeniería y Operación de Eletrosul, predica:

E se chega no menor preço pelo custo do investimento, a energia que cada fonte produz e o custo do dinheiro que tu pegas para realizar o projeto.

Y se llega al menor precio por el costo de inversión, la energía que cada fuente produce y el costo del dinero que tomas para realizar el proyecto.

Pero sucede que un río no es un canal, ni un drenaje, sino un organismo conectado por un sistema de flujos de arriba abajo. Para el coordinador del estudio de impacto integrado de la Cuenca del Río Uruguay (FRAG/Rio), Rafael Cruz, la primera pregunta al pensar en represar un río es cuál es la capacidad de soporte para las centrales hidroeléctricas. Cruz critica:

Quando se faz a contabilidade tradicional de uma usina hidrelétrica, e não se verifica a fragilidade do rio devido aos impactos ambientais, pode parecer limpa.

Cuando se hace la contabilidad tradicional de una central hidroeléctrica, y no se verifica la fragilidad del río debido a los impactos ambientales, puede parecer limpia.

Observando los lugares donde se ubican las hidroeléctricas, conversando con las poblaciones afectadas, cuestionando a las empresas, consultando especialistas y recopilando los datos disponibles, nuestro equipo buscó investigar cómo se tratan esas “externalidades” que se escapan del foco de la política energética cuando se hace la toma de decisiones.