Muerte de Aylan Kurdi obliga a Canadá a enfrentar su compromiso de ayudar a los refugiados sirios

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Reacciones tras la muerte del niño ahogado. Alexander: «Al padre del niño ahogado «no se le ofreció » ciudadanía canadiense». Chris Alexander, Ministro de Inmigración de Canadá y candidato a elecciones federales. Captura de pantalla del sitio web oficial de CBC News.

La muerte de Aylan Kurdi ha forzado a los políticos canadienses en medio de la contienda de una campaña electoral federal a abordar el hecho que, a pesar de una promesa de albergar a 10,000 refugiados sirios en Canadá, muy poco se ha hecho para lograr ese objetivo.

El martes 2 de setiembre, la imagen en una playa turca del cuerpo sin vida de Aylan (cuyo nombre se informó ampliamente como Alan), fue divulgada en medios sociales y publicada en las portadas de sitios de noticias en todo el mundo. El niño de tres años se había ahogado, al igual que su madre y su hermano Ghalib de cinco años, mientras trataban de viajar en bote a la isla griega de Kos.

Solamente sobrevivó el padre, Abdullah Kurdi.

Imagen de Abdullah Kurdi y sus hijos Aylan y Galip, que me envió un amigo de la familia. Te rompe el corazón.

Temprano en la mañana del miércoles, las muertes ya eran una importante noticia en Canadá y se informó que la familia Kurdi estaba tratando de llegar a la Columbia Británica, donde vive Tima Kurdi, hermana de Abdullah Kurdi. Tima dijo que se enteró de la muerte de Aylan y de otros miembros de la familia a través de las explícitas imágenes publicada en los medios sociales.

«No merecían morir», dijo a los reporteros.

Parlamentario había recibido una carta de la familia pidiendo ayuda

Tima Kurdi explicó que había presentado una solicitud de refugiado para su otro hermano, Mohammed, pero solamente tenía dinero para financiar a un hermano a la vez. Así que en sustitución, escribió una carta al ministro de Inmigración, Chris Alexander, pidiéndole ayuda.

Hablando en una radio de Vancouver, el parlamentario opositor Fin Donnelly explicó que él había entregado a mano a Alexander la carta de Tima, integrante de su circunscripción, en marzo de 2015, pero que no había recibido respuesta.

Acá se puede escuchar la la entrevista de Donnelly en CBC Radio: Alexander dijo que para preservar la imparcialidad como jefe del departamento de inmigración, había entregado el expediente a sus subordinados, y por eso no pudo ofrecer ninguna ayuda a la familia Kurdi, que no habían solicitado asilo.

Poco después de la entrevista de radio de Donnelly, Alexander anunció que suspendía las actividades de su campaña electoral por ese día para regresar a Ottawa a hablar con los funcionarios del ministerio sobre la crisis de refugiados sirios.

Canadá no está cumpliendo sus propias metas de refugiados

A comienzos de 2015, en respuesta a la intensa presión política, el gobierno del primer ministro Stephen Harper prometió instalar a 13,000 refugiados sirios en Canadá. Se espera que grupos religiosos y otras organizaciones privadas, no el gobierno, se hangan responsables de instalar a los refugiados.

Para el 27 de julio de 2015, el Ministerio de Ciudadanía e Inmigración de Canadá informó que solamente 2,302 refugiados de Siria se habían instalado en Canadá. En contraste, El Líbano, con una población de cuatro millones de personas (N. del T. en 2014, Canadá tenía una población superior a los 35 millones) ha aceptado a más de un millón de refugiados de Siria.

El gobierno de Harper «aclaró» su compromiso al comienzo de la campaña electoral en agosto de 2015: en caso de ser reelecto, recibiría a 10,000 «minorías religiosas» más, de Siria e Iraq para 2017, para un total de 23,000.

No ha sido fácil para los medios canadienses ni para los propios canadienese determinar si Canadá está cumpliendo con la firme promesa hecha en enero de 2015 de aceptar refugiados sirios. En julio de 2015, el influyente semanario canadienese Maclean's reportó que para averiguar cuántos refugiados habían ingresado debían pagar al gobierno de Harper para acceder a la información.

Sin embargo, las impactantes imágenes del cuerpo sin vida de Aylan Kurdi y el hecho de que la familia se había dirigido a Canadá luego de hacer un pedido directo al gobierno canadiense, han convertido el deplorable antecedente de Canadá en ayudar a los refugiados sirios en un asunto electoral.

Oposición canadiense pide al gobierno conservador que haga más

Canadá se acerca a las urnas el 19 de octubre de 2015. Hasta ahora, las elecciones han sido una apretada carrera de tres vías entre el gobernante Partido Conservador, encabezado por el primer ministro Harper; el Nuevo Partido Democrático (NDP) y el Partido Liberal de Canadá.

El miércoles 2, luego de la noticia de los intentos de la familia Kurdi de llegar a Canadá solamente para ser ignorados por el ministro de Inmigración Alexander y el gobierno conservador, Justin Trudeau, líder del opositor Partido Liberal hizo un llamado al Partido Conservador de Canadá a que aceptara más refugiados.

Este gobierno no está a la altura de sus valores. Inmediatamente debemos apoyar a los 25,000 refugiados sirios y hacer lo que nos toca hacer para poner fin a la crisis de los refugiados.

El NDP y el líder oficial de la oposición, Thomas Mulcair, que como Trudeau, espera reemplazar a Harper como primer ministro el 19 de octubre, hizo una emotiva solicitud para que Canadá haga más:

Como abuelo, es intolerable ver la imagen de ese cuerpecito en la playa. Canadá debe actuar. No esperemos más.

Algunos usuarios de Twitter criticaron a Mulcair por aparentemente usar a Aylan Kurdi para ganar algunos puntos polticos:

Como abuelo, es intolerable ver la imagen de ese cuerpecito en la playa. Canadá debe actuar. No esperemos más.
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El aprovechamiento que hace de esa imagen del niño muerto es lo más desagrable que he visto nunca en la política de Canadá.

Primer ministro Harper insiste en que la acción militar es la solución a la crisis de los refugiados

El actual primer ministro canadiense Stephen Harper, hablando en una manifestación de los conservadores afuera de Vancouver la tarde del miércoles 2, también se puso emotivo cuando trató sobre el destino de Aylan Kurdi y su familia.

Sin embargo, el primer ministro pronto adoptó un tono partidario, y se negó a aceptar más refugiados mientras atacaba al NDP y los liberales por votar en contra de expandir la campaña militar de Canadá contra el ISIS:

Cuando se le preguntó sobre la muerte de los miembros de la familia Kurdi en su camino a Canadá, Harper ignoró la posibilidad de acelerar el recibimiento de un número mayor de refugiados de Siria. En cabio, enfatizó que la acción militar debía abordar la causa raíz de la crisis de refugiados.

La tormente política en torno al destino de la familia Kurdi opacó otra potencial bomba política el martes 2 de setiembre, cuando un documento del Pentágono reveló que hasta hasta 27 civiles iraquíes habían muerto en un ataque aéreo canadiense.

Medios canadienses renuevan su atención a las penurias de los refugiados sirios

Mientras aumentaba la crisis humanitaria en el Mediterráneo y Europa a mediados de este año, hubo poca cobertura al respecto en los medios canadienses, que dieron más atención a la caída del precio del petróleo, la posibilidad de una recesión y una campaña para elecciones convocadas a comienzos de agosto.

Apenas horas antes de que se supiera que la familia Kurdi se dirigía a Canadá y que habían hecho un pedido directo al ministro canadiense de inmigración, The Globe and Mail, el diario más influyente de Canadá, publicó un editorial titulado «¿Crisis de migrantes? No, Europa enfrenta una crisis moral».

Los objetivos de Canadá sobre refugiados fueron mencionados solamente de pasada, en términos positivos comparados con la percepción de «inmoral» de la respuesta de Europa a la crisis:

Yes, in the first half of 2015, more than 300,000 migrants arrived in Europe. But that’s only about 0.1 per cent of the EU’s population. Canada takes in close to 1 per cent of its population each and every year, in the form of immigrants and refugees. Canada is not in crisis as a result. Quite the opposite.

Sí, en la primera mitad de 2015, más de 300,000 migrantes llegaron a Europa. Pero eso es solamente alrededor del 0.1 por ciento de la población de la Unión Europea. Canadá acoge a cerca del uno por ciento de su población cada año, en la forma de inmigrantes y refugiados. Canadá no está en crisis como resultado. Más bien, lo contrario.

Luego de la publicación de las terribles y desgarradoras imágenes de Aylan Kurdi, un usuario de Twitter notó que los políticos y críticos canadieneses destacan que la crisis puede estar fuera del alcance (Andrew Coyne, a la izquierda, y editor del National Post, diligentemente retuiteó esto):

El panel del programa At Issue, compuesto de personas blancas, discute las consecuencias de la crisis de refugiados.

Los alcaldes de las grandes ciudades también presionaron al país a responder más generosamente a la crisis de los refugiados.

Apenas 24 horas después de que la muerte de Aylan Kurdi fuera norticia mundial, en Canadá recién empezó la conversación seria sobre cómo ayudar.

Scott Gilmore, columnista que ha escrito con frecuencia acerca de la crisis humanitaria siria para la revista Maclean's, propone que los canadienses deben seguir presionando a su gobierno a que haga más, y que la actual campaña electoral en Canadá es una oportunidad para lograr un verdadero cambio:

En la política canadiense, a menudo pensamos en pequeño. Sobre la crisis de refugiados de Siria, es momento de pensar en grande.

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