«Sabemos que nada bueno sucede cuando el peso se devalúa». Foto: Juan Tadeo.

Además de la crisis de violencia e impunidad que enfrentan los mexicanos, ahora deben lidiar con la depreciación de su moneda frente al dólar estadounidense. A pocos días de que el Presidente Enrique Peña entregó al Poder Legislativo su Tercer Informe de Gobierno, el dólar alcanza un valor de cerca de $17.30 pesos por unidad, un máximo histórico.

Muy atrás se ven los días de agosto de 2014 en los que un dólar se vendía por cerca de $13.00 pesos (dato que era relevante en nuestra pieza sobre el poder adquisitivo del salario mínimo en México). Esta reciente depreciación evoca sombríos episodios del auge del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó al país por siete décadas en el siglo pasado y que ha regresado a la silla presidencial posicionando a Enrique Peña.

Hace un par de semanas el académico Leo Zuckermann explicó así este fenómeno:

El peso mexicano sigue depreciándose frente al dólar estadunidense. Ayer alcanzó un valor nunca visto: 16.72 pesos a la venta. Los mexicanos están muy preocupados. Nuestros traumas históricos de repente se aparecen. Sabemos que nada bueno sucede cuando el peso se devalúa. Ver en las sucursales bancarias, en grandes números, cómo el dólar cada vez vale más nos remite a las épocas de las crisis económicas ocurridas en los sexenios de Echeverría, López Portillo, De la Madrid, Salinas y Zedillo [todos ellos, expresidentes priístas].

El economista Víctor Piz ha calificado así la situación:

Dada la magnitud del ajuste cambiario, podría decirse que esta es la primera ‘gran devaluación’ de la moneda mexicana ante la divisa estadounidense.

En la historia de México, probablemente es una de las depreciaciones más significativas del tipo de cambio en términos reales.

No obstante el panorama poco alentador, el gobierno mexicano insiste en proyectar optimismo al grado de que el presidente ha declarado que la caída del peso mexicano frente al dólar hace al país “más competitivo”, como lo reportó Animal Político.

Ese optimismo entra en contradicción con las cifras y con la realidad que viven millones de mexicanos día a día con ingresos cada vez menores, situación que no fue ampliamente abordada en el Informe de Gobierno que entregó el titular del Poder Ejecutivo. Lilia Arellano había anticipado lo siguiente:

Lo curioso será ver como los tecnócratas de Los Pinos disfrazan este fracaso gubernamental en el III Informe de Gobierno que habrá de presentar al Congreso de la Unión Enrique Peña Nieto en cuatro días hábiles, y cómo habrán de difundirse logros inexistentes de la cartera de gobierno que se le confió a Rosario Robles Berlanga, quien se ha destacado y cobrado fama –al igual que su antecesora Josefina Vázquez Mota- como manipuladora de recursos presupuestarios destinados al combate a la pobreza para convertirlos en votos a favor del partido gobernante, al margen de la legislación electoral. [Los Pinos es el nombre con el que se conoce a la residencia oficial del presidente mexicano].

En Twitter, ElInformanteMX ha referido que el presidente ha perdido credibilidad en su mensaje:

El Presidente @EPN nuevamente pierde credibilidad ante #Mexicanos, spots del #3erInforme #SeVeFalso #SpotsDeTelevisa pic.twitter.com/m9hiePBQqO

— EL INFORMANTE (@ElInformanteMX) August 31, 2015

El usuario froyvel se expresó así sobre el alza en el “billete verde”:

Es de risa eso del PESO frente al dólar -NUEVO MAXIMO HISTÓRICO- memoria corta de menos de 35 años. Pero hacia ya vamos…

— froyvel (@froyvel) August 21, 2015

Por su parte, Korno Espinisa, compartió la siguiente imagen:

Devaluación del peso frente al dólar en los últimos 4 sexenios. pic.twitter.com/oMuws4jEe5

— Korno Espinosa (@korno) August 31, 2015

El usuario Dealer hizo el siguiente comentario:

Los mexicanos que dicen que les conviene la devaluación del peso frente al dólar no tienen ni la menor noción de economía y sentido común.

— Dealer (@MorganPalafox) August 26, 2015

En sentido opuesto, el economista Isaac Katz ha apuntado lo siguiente:

Si alguien en materia económica se presenta como un experto, no le hagan caso

— Isaac Katz (@econoclasta) August 28, 2015

Antes de concluir, no está por demás tener en cuenta que el responsable de las finanzas públicas, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray, figura en la lista de aspirantes a la presidencia al concluir el presente sexenio. Un tema sobre el cual Jorge Castañeda se ha pronunciado de la siguiente manera:

Si no se acaba el mundo, a pesar del pésimo desempeño de la economía, de las previsiones equivocadas, de las medias verdades sobre la incidencia relativa del factor interno y externo en el aletargamiento económico, de la depreciación del peso y de la apreciación en la casa de Malinalco y sus obras de arte, el candidato de EPN será Videgaray. Si le atino, se lo recordaré a los lectores; si me equivoco, espero que no se acuerden.

Mientras la estrategia y el mensaje oficial proyectan bonanza financiera, las expresiones de analistas y de la ciudadanía en general nos permiten apreciar la realidad económica que vive México, misma que debe ser observada también en el contexto del fracaso gubernamental en temas de seguridad y justicia, como lo dejan ver la segunda fuga del Chapo Guzmán y las ya recurrentes masacres de civiles a manos de agentes del gobierno, como en Iguala, Tlatlaya y Tanhuato.