Brasil: El racismo en primera plana tras brutal golpiza a adolescente negro

O jovem preso ao poste apenas com um pedaço de jornal para cobrir sua nudez após ser humilhado. Foto de uso livre.

El joven atado a un poste de luz con sólo un pedazo de periódico para cubrirse. Foto de uso libre.

Un adolescente negro de 15 años de edad fue hallado sentado en el suelo en la playa Botafogo, en una área central de Río de Janeiro, completamente desnudo y con un candado de bicicleta alrededor del cuello que lo encadenaba a un poste de luz el 1 de febrero de 2014.

Desafortunadamente, este no es un caso aislado, pues ataques de grupos de «vigilantes» se han convertido en algo común [pt] en Río de Janeiro.

La activista Yvonne Bezerra de Mello, quien descubrió al menor, escribió [pt] en su página de Facebook que se preparaba para dormir cuando un amigo que estaba conduciendo por la avenida Rui Barbosa la llamó para decirle «vi a un joven lastimado, desnudo y atado a un poste con un candado de bicicleta. Fue golpeado por una pandilla de motociclistas que roba con frecuencia en mi calle».

Ella llamó a los bomberos para que lo liberaran y el muchacho fue llevado al hospital. Ella, por su parte, comenzó a recibir [pt] amenazas.

En una declaración a la policía, el joven dijo [pt] que había sido perseguido por un grupo de cerca de treinta hombres en motoclicletas armados con al menos una pistola mientras caminaba con tres amigos (dos escaparon) para nadar en el mar. Fue golpeado, desnudado y atado a un poste. El chico de 15 años ha estado en las calles [pt] de Río por al menos dos años desde que fue atrapado robando un taladro eléctrico de una familia vecina y fue forzado a irse de su casa.

La policía cree [pt] que los responsables del ataque son los «vigilantes Flamengo», quienes atacan y torturan a cualquiera que consideren que luce sospechoso; también son acusados de asaltar a homosexuales. Cerca de 15 miembros sospechosos del grupo fueron arrestados por la policía.

Cartum de Carlos Latuff, uso livre.

Caricatura de Carlos Latuff. De uso libre.

La periodista Rosiane Rodrigues, al escribir para Afropress, criticó a Bezerra de Mello por tomar una foto de la víctima y publicarla en Facebook en vez de simplemente llamar al departamento de bomberos y a una ambulancia. En su opinión [pt]:

A cena chocou. É possível que o motivo da consternação tenha sido o local da ação e não a ação em si. Sim. Um menino, amarrado ao poste, em uma rua da Zona Sul do Rio de Janeiro, não é um fato comum. Meninos, amarrados em postes, baleados, espancados, violentados não cabem na paisagem da Zona Sul da cidade. Essas devem ser imagens periféricas, cotidianas das favelas, dos subúrbios. Imagens de barbárie que já não chocam nem causam espanto aos olhos dos que estão – e devem continuar – à margem. 

O «menino amarrado ao poste»‘ deu sorte. Ele poderia estar morto. Se assim fosse, seria mais um a entrar para a estatística da barbárie cometida diuturnamente nos becos e vielas em todo País. Imagens de corpos violados, machucados, inertes… reflexos distantes de uma realidade encoberta aos olhos sensíveis de uma parcela da população que teima em não querer enxergar: a indústria do genocídio da juventude preta e pobre.

La escena era impactante. Es posible que la razón de la consternación fuera el lugar donde ocurrió el incidente y no el incidente mismo. Sí, un muchacho atado a un poste de luz en una calle en la zona sur de Río de Janeiro no es un suceso común. Jóvenes encadenados a postes de luz, heridos de bala, golpeados, violados, no encajan con el paisaje del sur de la ciudad. Estas deberían ser imágenes periféricas, del día a día de los barrios pobres, de los suburbios. Las imágenes de barbarie ya no impactan o causan asombro a los ojos de aquellos que están  – y deberían continuar – en los márgenes.

El «muchacho atado al poste» tuvo suerte. Pudo haber muerto. De haber sido así, habría sido el último en sumarse a las estadísticas de actos de barbarie cometidos incesantemente en callejones y calles a lo largo del país. Las imágenes de cuerpos violados, heridos, inertes… producen reflexiones distantes de una realidad oculta a los ojos de la población sensible que insiste en no querer ver: la industria del genocidio de jóvenes negros y pobres.

El activista Caio Almeida advirtió [eng] en Facebook del peligro de la formación de una «milicia fascista» en Río de Janeiro, como los llamados «vigilantes», y añadió que «lo que está pasando en el barrio Flamengo es muy serio»:

Esses caras agridem homossexuais, ambulantes que não concordam com o preço cobrado pela cerveja, usuários de maconha ou negros sozinhos. Em suma, tocam o terror para garantir que o bairro deles sejam para os ricos, brancos e com os mesmos hábitos sociais(e até sexuais!) que eles.

Estos tipos atacan solo a homosexuales, vendedores ambulantes con los que no están de acuerdo en el precio que cobran por la cerveza, consumidores de mariguana y negros. En resumen, ellos usan el terror para asegurar que su barrio pertenezca a ricos y blancos con los mismos hábitos sociales (¡e incluso hábitos sexuales!) de ellos.

De acuerdo con el joven atacado, todos los asaltantes eran «playboys» blancos excepto uno que era moreno.

Montagem de Paul Henry Jr.

«Sur de Estados Unidos, Siglo XX / Brasil, Siglo XXI. El racismo siempre se disfraza de justicia para actuar.» Montaje de Paul Henry Jr.

El activista Paulo Henry Jr escribió en Facebook [pt] que incluso si el hombre fue responsable de robos en la zona, la actitud de golpearlo y humillarlo «no deja de ser brutal», y que debería ser la policía la encargada de investigar la veracidad de los cargos y llevarlo a juicio. Añadió:

Mas a Ku Klux Klan versão brasileira que de tão cômoda nem sequer precisa usar capuz e lençóis, age livremente sem ser perturbada fazendo nas ruas a sua maneira aquilo que considera justiça.

Pero la versión brasileña del Ku Klux Klan, que se siente tan cómoda que ni siquiera necesita usar capuchas y sábanas, actúa libremente sin ser molestada, haciendo lo que les parece con lo que ellos consideran justicia.

Otros casos similares han ocurrido recientemente. Hace unos años en el barrio Botafogo de Río, motociclistas desnudaron a un hombre negro y lo dejaron en la acera bajo el sol abrasador después de acusarlo de tratar de robar una motocicleta, describe [pt] John Batista Damasceno. Los bomberos ayudaron [pt] a los motociclistas a quitarle la ropa al hombre y un guardia municipal fue testigo de la escena sin intervenir:

El papel de los medios en la difusión del horror

La indignación por este caso reciente hubiera sido menor de no haber sido por la intervención de la presentadora de televisión de «Jornal do SBT» Rachel Sheherazade, conocida por sus comentarios conservadores. En horario estelar dijo [pt]:

“Num país que sofre de violência endêmica, a atitude dos vingadores é até compreensível”, disse a apresentadora. “O Estado é omisso, a polícia desmoralizada, a Justiça é falha… O que resta ao cidadão de bem, que ainda por cima foi desarmado? Se defender, é claro”. E finalizou: “O contra-ataque aos bandidos é o que chamo de legítima defesa coletiva de uma sociedade sem Estado contra um estado de violência sem limite”.

«En un país que sufre de una violencia endémica, la actitud de los vengadores es incluso comprensible», dijo la presentadora. «El estado está ausente, la policía desmoralizada, la justicia con fallos… ¿Qué queda para el buen ciudadano, que además no esta armado? Defenderse ellos mismos, por supuesto». Concluyó: «El contrataque a los rufianes es lo que llamo defensa propia colectiva por parte de una sociedad sin gobierno contra un estado de violencia sin límites».

https://www.youtube.com/watch?v=at89CynMNIg

La reacción fue inmediata, tanto en apoyo como en rechazo. El hombre de negocios Vinicius Duarte comentó en Facebook [pt]:

Quando um telejornal de grande audiência permite que se faça apologia a um crime (sim, ~cidadão de bem desarmado~, acorrentar bandidos ou inocentes nus em postes é CRIME), é sinal que a barbárie está vencendo o jogo.

Cuando un programa de noticias de gran audiencia permite la apología de un crimen por cometerse (sí, usted -buen ciudadano desarmado- encadenar bandidos o inocentes a un poste de luz es un CRIMEN), es una señal de que la barbarie está ganando el juego.

El perfil del colectivo social Pedra no Sapato, haciendo un juego de palabras con el nombre de la presentadora, señaló [pt] que Sheherazade se superó a así misma con su declaración:

[ Cheira a Nazi ]
Defendeu a ação da milicia carioca que prendeu o adolescente ladrão e negro num poste com uma tranca de bicicleta no pescoço, o espancou e o deixou nu. Acha normal, natural algo assim. Afinal, já que vivemos em estado de barbárie, não custa nada nós mesmos começarmos as nossas, né? Ninguém esta defendendo os atos de banditismo do moleque, agora chamar de ‘compreensível’ e ‘legítima defesa’ uma barbaridade dessas é sinal de que essa mulher não tem um pingo de humanidade!

(Huele a Nazi) [un juego de palabras con los sonidos de la palabra Sheherazade]

Ella defendió la acción de la milicia de Río que ató al adolescente ladrón y negro a un poste de luz con un candado de bicicleta alrededor del cuello, lo golpeó y lo dejó desnudo. Ella lo considera normal, algo así es natural. Después de todo, ya que vivimos en estado de barbarie, no cuesta nada comenzar la nuestra [barbarie], ¿verdad? Nadie está defendiendo el bandolerismo del muchacho; ¡pero decir que un acto bárbaro como este es «comprensible» y  en «defensa propia» es una indicación de que esta mujer no tiene ni una pizca de humanidad!

Montagem do ativista Julio Ferreira

Montaje hecho por el activista Julio Ferreira: «‘Buen ciudadano'» era el nombre del periódico del KKK».

El estudiante Mosiés Teixeira demandó [pt] que Sheherazade «sea responsable por la metedura de pata presentada en horario estelar» y que aquellos que la apoyan deberían «reflexionar un poco antes de emitir opiniones llenas de lemas que no son más que estupideces refinadas».

Según la Unión de Periodistas de Río de Janeiro, el castigo llegará [pt]. La Unión y su Comité de ética no sólo expresaron su repulsión, sino que exigieron a la Federación Nacional de Periodistas tomar acción «en este y otros casos de violación de los derechos humanos y del Código de ética de los periodistas brasileños». La Unión de periodistas del Distrito Federal también declaró su repulsión hacia las declaraciones de Sheherazade y agregó que le pedirán al fiscal que tome acciones.

El partido Socialismo y libertad (PSOL) anunció [pt] que también exigirá sanciones para la presentadora.

Para el activista y periodista Rodrigo Mariano [pt], Sheherazade «alcanzó un nivel en el que ahora apoya a asesinos públicamente en la televisión nacional. Y la chica comparte la misma profesión mía, ya ven. Ella tomó su juramento y lo revirtió. Se limpió el trasero con su diploma, definitivamente».

Después de todas estas repercusiones, SBT publicó una nota [pt] declarando que la periodista no representa las opiniones del canal. Sheherazade usando tiempo al aire en «SBT Journal» trató de explicarse [pt], diciendo que ella estaba «del lado bueno, del lado de los ángeles», lo cual es [pt]:

uma crítica da violência. Eu defendo as pessoas de bem deste País, que foram abandonadas à própria sorte, porque não tem polícia, não tem segurança pública. O que eu fiz não foi defender a atitude dos justiceiros. O que eu defendi foi o direito da população de se defender quando o Estado é omisso

una crítica de la violencia. Defiendo a la gente buena de este país, que fueron abandonados a su suerte porque no tienen policía ni seguridad pública. Lo que hice no fue defender la actitud de los vigilantes. Lo que defendí fue el derecho de la gente a defenderse cuando el estado está ausente.

Imagem de Divulgação do SBT.

Rachel Cheherazade. Imagen para publicación de SBT.

En otras palabras, Sheherazade mantiene un punto de vista que, para el activista Robson Fernandes, «es tradición en la derecha conservadora brasileña» y consiste en «hacer una división maniquea de la sociedad entre ‘buenos ciudadanos’ y ‘vagabundos'».

Y añadió:

Nessa crença que divide a sociedade entre “bons” e “maus”, os primeiros seriam pessoas “cidadãs” que “pagam impostos”, “respeitam as leis”, “lutam para vencer na vida” e se dizem “incapazes” de cometer qualquer crime ou dano contra outras pessoas e também contra animais não humanos. E os segundos seriam inimigos da ordem, ameaçadores da vida alheia, preferidores de “caminhos fáceis”, como a criminalidade ou o recebimento de benefícios financeiros pelo Estado, sendo muitos deles autênticos demônios do mal que deveriam ser presos, torturados pela polícia e/ou mortos.

En esta creencia que divide a la sociedad en «buenos» y «malos», los primeros serían los «ciudadanos» que «pagan impuestos», «siguen las leyes», aquellos que «luchan para tener éxito en la vida» y se dice que «no son capaces» de cometer un crimen o hacerle daño a otros animales humanos o no. Y los últimos son enemigos del orden, que amenazan las vidas de los otros, aquellos que prefieren el «camino fácil», como el crimen o recibir beneficios financieros del estado, siendo muchos de ellos auténticos demonios malvados que deberían ser arrestados, torturados por la policía y/o matados.

El oficial de la policía militar del estado de Bahía y colaborador de Global Voices, Danillo Ferreira, lo dejó claro [pt]:

Nenhuma violência deve ser celebrada. Tentativas violentas de vingança e “resposta” a outros atos violentos apenas alimentam os ciclos de violência. 

Ningún tipo de violencia debe ser celebrada. Los intentos de venganza y la «respuesta» violenta a otros actos de violencia solo facilita el ciclo de violencia.

Una petición que hasta ahora ha reunido más de 50.000 firmas [pt] fue creada para exigir castigo para la periodista. Un evento en Facebook fue creado para pedir de manera humorística el reemplazo del programa de noticias presentado por Sheherazade con la popular serie mexicana [pt] «El Chavo», cuyo personaje principal «tiene mucho que enseñarnos sobre la tolerancia y la igualdad».

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.