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Resumen del Festival de blogs: ¿Amas internet?

Categorías: Europa Occidental, Latinoamérica, Argentina, Colombia, Ecuador, España, México, Nicaragua, Perú, Activismo digital, Ideas, Medios ciudadanos, Festival de Blogs GV

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Tal como anunciamos [1] hace unos días, llegó el momento de presentar los resultados de nuestro, en esta ocasión relámpago, Festival de Blogs. El tema era Yo amo Internet y quedó a la imaginación y creatividad de los blogueros cómo plasmar esta idea. Idea que por cierto surgió en apoyo de la campaña #YoAmoInternet [2].

Entonces, pasemos a ver que dijeron nuestros amigos bloggers. Empezamos con Milton Ramírez, un ecuatoriano en New York, quien en Geek's Room [3] comenta que «En principio parece una desaprensión semántica» hablar de amor a internet, algo que normalmente sucede sólo entre personas, pero luego explica que «El objeto es valorar los usos de la Web. Exprese su agradecimiento en el contexto de San Valentín a los beneficios que le ofrece el Internet.» Al final concluye [4]:

Amo el internet porque sin él no estuvieran leyendo estas líneas y porque nos ha servido para conocer millones de personas en miles de áreas. No más expertos y no más restricciones sobre la información.

La nicaraguense Ángeles Estrada escribe desde Francia en su Blog de Ángeles [5] y empieza su post comentando que «Me pareció divertido ver al internet con afecto. Así… todo cariñoso por el día del amor y la amistad.» Tras contarnos su periplo en internet confiesa [6] por qué lo ama:

Internet me ha dado otra vida. Una vida virtual que se adiciona a mi vida real y suma, llena y complementa. Abre puertas a mi curiosidad y apacigua la inquietud de mi espíritu inquieto, explorador, aventurero, quizás vagabundo. Mi vida hoy es una fusión entre lo real y lo virtual, intima y durable. Una simbiosis perfecta, hongo y árbol.

nscap, ciudadana del mundo (2.0) [7] es el blog de Isabel Garnica, una española viviendo en Buenos Aires, Argentina. Ella fue defrente al grano y manifiesta [8]:

Yo Amo Internet porque: aprendo [9], enseño [10], trabajo [11], comparto mi trabajo [12], viajo [13], blogueo [14], juego [15], hago [16] amigos [17], conozco personas [18], porque #InternetCambiaTodo [19], porque me siendo una ciudadana global [20], reivindico [21] derechos [22], difunde proyectos sociales [23], nos empodera como ciudadanos [24], ayuda a caer dictadores [25], por muchas [26] muchas [27] muchas más razones [28]… y sobretodo porque me permite soñar un mundo mejor [29].

Gabriela García Calderón escribe su blog Seis de enero [30] desde Lima, Perú. Ella recuerda [31] cómo era el tiempo en que las comunicaciones por lo general se hacían mediante cartas.. escritas en papel, y cómo las cosas han evolucionado con internet:

¿Por qué amo internet? Porque nos comunica, nos conecta, nos contacta, nos acerca y más con apenas un clic. Y porque además permite que la magia del correo real siga existiendo, espero que por mucho tiempo.

Desde Extremadura, España, Alicia Cortés lleva el blog Creatividad Rezumante [32] y en un inspirado poema nos describe [33] su amor por internet:

Internet, te amo
por tí navegaría
toda la noche y el día
prendida a tu mano…

Volaría sin tiempo
en tus redes de viento

Daniela Gallardo, desde Loja, Ecuador, nos cuenta [34] en su blog Veo y escribo [35] cómo es un día suyo con internet y los sitios que prefiere visitar, pero antes se sincera:

Debo amarlo demasiado para dedicarle un post (algo que ni siquiera lo he hecho con mi novio) por San Valentin. La verdad es que #YoAmoInternet porque, básica y sencillamente, me tiene conectada al mundo. Es fascinante si no lo llevamos al extremo, claro.

Gina Yauri otra lojana, nos cuenta su relación con internet en su blog Ximealito [36] y concluye [37]:

Internet es un mundo de información abierto que tiene varias puertas, solo debes saber cómo utilizarlas y bajo tu responsabilidad sabrás llevar una vida plena con una pasión por el internet.

Iván Mejía, el blogger de Tantas Cosas, [38] escribe una carta recordando [39] su historia con Internet y reflexiona:

A veces de tan cotidiano parece difícil procurarle amor al internet, como la electricidad el internet ( o será la internet?) pareciera algo que solo se aprecia cuando se va.
 

El mexicano Israel Rosas escribe [40] también una carta a Internet en su blog homónimo [41]:

Dicen que ya no eres aquella a quien solíamos conocer, que los ataques te han hecho cambiar y que las cosas ya no serán como antes. Hoy te escribo convencido de que mantienes esa naturaleza abierta e innovadora con la cual te conocí y que tanto me gusta.

Desde su natal Medellín, Colombia, Catalina Restrepo lista en su blog Cosas el Alma [42], las razones por las que le gusta internet, que van desde el acceso a la información al compartir con otros, y luego declara [43]:

a usar internet. A usarlo bien. El problema no es la herramienta, si no su uso. Y es uno el que decide lo que hace con lo que le dan. Creo que yo lo usé para encontrarme con el mundo.

Madame Web, desde la colombiana ciudad de Pasto, escribe el blog La lógica de mi Papá [44] y nos cuenta que no es la primera vez que hace público su amor por internet, pero añade [45]:

Debo decir que este amor ya no es el mismo que al principio, ha ido cambiando a medida que la red ha crecido y como en toda relación ahora hay cosas que, pequeños detalles, me molestan…como la propagación de virus, spam y troyanos…pero es algo inevitable, aunque tomando las medidas correctas se pueden prevenir estos males y otros relacionados con la seguridad online. […] Ahí les dejo esa inquietud, ¿Qué tan buenos usuarios somos?

La gente del colectivo mexicano Sursiendo [46] blog explica [47] Internet y por qué debemos amarlo:

Internet es lo que queramos que sea, por eso lo amamos, porque en nuestras manos  (mentes, corazones…) está darle forma y comprometerse con él/ella(ello), para que no desaparezca, no lo mutilen, no lo neutralicen, no lo desvirtúen o no lo controlen. No lo dejemos en otras manos. Amemos Internet.

José del Sol bloguea en Buscando el optimismo [48] desde Irún, España y cuenta que lo suyo fue un flechazo, pero ahora [49]:

De vez en cuando reflexionamos sobre cómo hemos evolucionado. Mis kilos siguen ahí, no como mi pelo, y ella ya no es aquel mundo inocente e ilusionado de cuando nos conocimos. A veces fría y comercial -hay que vivir-, otras enfrascada en luchas políticas, los dos tememos qué le pueda llegar a pasar. Últimamente ha crecido el peligro de que de artesana autónoma pase a ser funcionaria sin identidad de un estado policial o empresaria libertaria sin respeto por la privacidad de nadie. No sabemos qué camino seguirá, pero como con una persona, creo que no podré abandonarla a su suerte.

El activista mexicano Jesús Robles Maloof deja clara su posición en un post [50] en su blog [51]:

Defenderé un internet libre porque me ha permitido conectarme con otros y luchar por la libertad de las personas. […] No me imagino su libertad sin internet y en este sentido amo a internet [2]. La vigilancia masiva de la red amenaza esta capacidad de movilización al dar a los gobiernos la posibilidad de anticiparse.

Desde la ecuatoriana ciudad de Loja, Bolívar Loján Fierro en Ni lo uno ni lo otro, más bien todo lo contrario [52], nos cuenta el procedimiento que había que seguir hace más de 40 años para realizar una llamada telefónica y lo compara con la inmediatez de herramientas actuales como Skype. En una vuelta de tuerca cienciaficcionesca su último párrafo lo escribe [53] desde el año 2020:

Estoy a mis 72 años liderando en el mundo una campaña de «Derecho a la privacidad», mi compañera llamada «Internet», en una pequeña pelea que tuvimos colocó mis datos a disposición del mundo. Me birlaron lo poco de mis ahorros y de privacidad. Me fui a vivir en la montaña, donde queda un poco de agua, elemento vital que perdimos mientras todos estábamos sentados asumiendo que el mundo se podía construir desde un teclado, cosas táctiles y realidades aumentadas. «Amo a internet», era mi grito de guerra, ahora es «Amo a mi privacidad», mientras los analfabetas digitales que viven en el campo felices con sus sementeras y ancestros en la ciudad andan como locos buscando algo que llaman comida virtual. Ya la privacidad poco importa.

Y bueno, aunque el Festival tuvo una duración de sólo 5 días nos complació ver que varios bloggers se animaron a participar. Recomendamos dar click en cada post participante para que puedan leer las opiniones completas de los blogueros. Desde aquí pues mi sincero y profundo agradecimiento (y el de Global Voices en Español) a todos ellos por su esfuerzo y dedicación al dedicar su valioso tiempo en contribuir a esta iniciativa.

Y por cierto ¡Felíz Día de San Valentín!