Japón: La radio de los refugiados

Nanmin Now

El presentador Katsuya Soda habla a la audiencia de Radio Cafe, una estación de radio comunitaria en Kioto. Radio con licencia. 

“Aquí, en Japón, es distinto. Es más seguro, más tranquilo”, me dijo una amiga cuando yo le conté sobre el objetivo de Global Voices: escuchar historias del otro lado del mundo, porque “el mundo habla”.

Ella agregó: “Aquí casi no hay necesidad de que las personas expresen alguna opinión o algún punto de vista, sobre todo cuando se vive tranquilo si se respetan las normas”.

En cierto modo, tiene razón. Los japoneses no siempre tienen que preocuparse por lo que pasa en otros lugares. Los titulares lo reflejan: en las transmisiones públicas de noticias de la tarde, las noticias internacionales sólo representan el 7% de todos los informes. Un investigador que estudió las transmisiones [ja] durante tres meses descubrió que sólo dos minutos, o el 0,7% de todas las noticias, estaban destinados a dar información relacionada al continente africano.

En general, todo lo que pasa fuera de la isla no tiene importancia para los japoneses, salvo que esté vinculado a Corea del Norte y sus pruebas nucleares o a algo importante sobre la potencia mundial estadounidense. Como dicen, la ignorancia es la base de la felicidad.

Sin embargo, el japonés Katsuya Soda no está de acuerdo con esa mirada. Él cree que la indiferencia del público a lo que pasa en el mundo complica la realidad en Japón. En febrero de 2004, Katsuya comenzó Nanmin Now! [ja], un programa de radio sobre los refugiados y sus problemas, que se emite en una radio comunitaria en Kioto. El programa comienza con una introducción de Katsuya en un dialecto de Kioto: “Es hora de Nanmin Now! Un programa que da información sobre los refugiados al estilo del pronóstico del tiempo.”

Antes de que Internet y las redes sociales se convirtieran en el lugar de preferencia para la expresión popular, las FM de baja potencia, o las radios comunitarias, eran el único medio disponible para quienes, en una ciudad conservadora como Kioto, querían transmitir noticias relacionadas a la situación crítica de los refugiados.

“En aquel momento, la información que circulaba en Internet tenía aún menos credibilidad de la que tiene hoy”, dice Katsuya. “Yo pensé que era importante brindar información a través de un medio que le fuera familiar a las personas. La radio comunitaria no llega a una gran audiencia, pero es un medio confiable, ya que la información que se brinda está regulada por las leyes sobre la circulación de información.”

Con Nanmin Now!, la ambición de Katsuya era dar noticias sobre los refugiados de manera tal que sus problemas se volvieran un tema importante en la mente de los demás japoneses. La inspiración para comenzar este programa surgió tras leer un libro de Sadako Ogata [en], ex Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). “El libro enseñaba la importancia del papel de los medios y de las relaciones sustentables, y la idea de imitar al pronóstico del tiempo me vino a la mente,” dice Katsuya. “Decidí comenzar un programa de radio que informe continuamente sobre los problemas de los refugiados y que tuviera el mismo formato utilizado para dar el informe del clima.”

Desde que comenzó el programa, Katsuya ha entrevistado a más de 500 personas sobre temas relacionados a los refugiados. La transmisión dura seis minutos y se emite los sábados.

La palabra «refugiados» —“nanmin” en japonés— no suele aparecer en los titulares japoneses. Japón acepta menos de 50 refugiados por año (en 2010, aceptó sólo 39), aunque está segundo en el listado de países que más contribuyen financieramente al ACNUR. Para un país insular que es seguro y pacífico, sorprende que el número sea tan bajo. Algunos de los que buscan asilo [en] en Japón enfrentan, incluso, dificultades [en] como la deportación [en] y la detención [en]. Para los japoneses, los problemas de los refugiados ocurren del otro lado del mundo, del lado más pobre. “Es como si fuera una aflicción distante”, dice Katsuya, “no sólo desde un punto físico, sino también desde un punto de vista mental. Las personas creen que ellas nunca van a ser refugiados”.

La misión de Nanmin Now! es garantizar que “todos los niños del mundo puedan dormir seguros en su hogar”, en referencia principalmente a lugares como ciertos países de África o Afganistán y Birmania, de donde proviene la mayoría de los refugiados. Sin embargo, tras el terremoto ocurrido en Japón en marzo de 2011 y el posterior accidente de la planta nuclear Fukushima Daiichi, Katsuya comenzó a preocuparse por los niños en Japón.

El desastre destruyó 126.583 residencias [ja] y, sólo en Fukushima, 160.000 personas fueron evacuadas [en] de su hogar. Ahora 100.000 personas viven en alojamientos temporales en Fukushima y otras 60.000 personas están distribuidas por todo Japón.

Tras el terremoto, Katsuya reunió a un equipo para establecer una estación de radio temporal en el área afectada por el desastre para brindar información de carácter urgente. Cuando el gobierno elevó el límite de exposición a la radiación  [ja] en niños de 1 a 20 milisieverts, algunos ciudadanos comenzaron a pensar que sus propios líderes los estaban poniendo en peligro y Katsuya se involucró activamente con los evacuados de Fukushima.

“Cuando me comuniqué con los evacuados de las áreas que presentaban altos niveles de radiación”, dice Katsuya, “empecé a ver similitudes entre los evacuados de Fukushima y los refugiados: ambos problemas están relacionados a la violencia estructural. Las personas tuvieron que irse de su hogar en Fukushima porque hubo un accidente nuclear. Establecer una planta de energía nuclear es una forma de colonización interna, que las comunidades marginales tienen que aceptar.»

Para los ciudadanos japoneses, el terremoto y el accidente nuclear en Fukushima de 2011 hicieron que el tema de los refugiados fuera más cercano, lo que validó y amplificó el trabajo que Katsuya viene realizando desde hace casi 10 años.

Nanmin Now! se transmite en FM79.7MHz, una radio comunitaria en Kioto y también en linea [ja]. El primer libro de Katsuya Soda [en japonés] La propuesta de una radio comunitaria en una era en la que todos podemos ser refugiados: Conectar las Voces de Fukushima se encuentra disponible [ja] en Amazon.co.jp.

Keiko Tanaka es un entusiasta de los medios civiles japoneses y está interesado en el compromiso digital y la cultura radiofónica y juvenil.  

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