Recientemente, el presidente zambiano Michael Sata llamó «tonto» a uno de sus principales ministros en la televisión nacional [en] por no haber mandado reparar una residencia presidencial para invitados en Kitwe, la segunda ciudad más grande del país, situada a unos 400 km de la capital, Lusaka.

Sata dirigiéndose al parlamento. Foto usada con el permiso de Lusaka Times.

El incidente se produjo pocas semanas después de que Sata reprendiera al vicepresidente Guy Scott y a algunos de sus ministros también en la televisión nacional. A continuación se muestra un video subido a Youtube por el usuario Matongo Maumbi en el que se puede ver a Sata reprendiendo a uno de sus ministros:

Sata es conocido por su mordacidad y por su desprecio por el protocolo tanto en ámbitos locales como internacionales, algo que parece hacer que los zambianos se avergüencen cada vez que aparece en público. Sin embargo, los comentarios que han planteado preguntas sobre el estado del líder, que tiene 76 años y fue elegido hace dos, son los que este realizó el 20 de noviembre cuando insultó a los miembros del parlamento de la región mientras se encontraba en un acto de campaña en Mansa, la capital de la provincia de Luapula (situada a unos 1000 kilómetros de Lusaka).

Citando a la emisora de radio de la comunidad Yangeni [en], el Zambian Eye señala [en]:

El presidente Michael Sata ha dicho que los miembros del parlamento de la provincia de Luapula son tontos. Radio Ya[n]geni, una estación de radio comunitaria en Mansa, informa que el presidente Sata dijo esto en un mitin celebrado hoy en la Escuela Primaria Muchinka. En el mitin Sata intentaba obtener respaldo para el candidato del Frente Patriótico (FP) que se presenta a las próximas elecciones parciales en el distrito electoral de Mansa Central.

En la página del crítico Proud Aushi Musamba Mumba, Barbara Chanda [en] comentó:

Tenemos personas cercanas al presidente que no pueden decir la verdad por miedo a ser reprendidos. Sí, Sata tiene derecho a quejarse pero no hasta ese punto. Por desgracia, nosotros los africanos también estamos un poco chiflados: enseguida empezamos a saltar arriba y abajo como ratas envenenadas diciendo que él es proactivo y que incita a sus parlamentarios a trabajar mientras el resto de la población tiene miedo a ser despedida. ¡Los miembros del parlamento no son capaces de tomar decisiones porque podrían ofender a Sata!

Antes del viaje de Sata a Mansa, la página web Zambia Reports escribió sobre lo que se esperaba del jefe de Estado [en]:

Se espera que el presidente, que es espontáneo en sus apariciones públicas y que a veces actúa de forma histriónica, se dirija a los militantes durante su primer mitin en Muchinka. Es probable que los residentes de Mansa disfruten de una parte del teatro de su jefe de Estado.

En relación con el incidente de Kitwe, en el cual el ministro de Comunicaciones, Obras y Suministros, Yamfwa Mukanga, fue criticado severamente, el Zambian Watchdog informó [en]:

En el día de hoy, el presidente Michael Sata volvió a salirse de sus casillas e insultó públicamente a Yamfwa Mukanga (el ministro de Comunicaciones, Obras y Suministros) por lo que pasó con la residencia presidencial situada en Ndeke, municipio de Kitwe. […] Mukanga fue regañado como si de un niño se tratase ante sus empleados y las cámaras de televisión. Mukanga, sin poder hacer nada, siguió sonriendo delante del presidente zambiano al que apodan “rey cobra”. 

Durante un acto previo para conmemorar el Día del Armisticio, que cada año se celebra el 11 de noviembre, el presidente Sata reprendió a Mukanga y a otros oficiales. El medio de comunicación el Post informó sobre la historia [en]:

¿Dónde está Yamfwa Mukanga? ¿Por qué no hay agua aquí y por qué la hierba no es verde? ¿Por qué no has hecho nada en la tumba de Chiluba (el segundo presidente de Zambia)? Kale sana nakweba (Te lo dije hace mucho tiempo) […] Lo haré yo mismo si tú no eres capaz de construir un mausoleo para Chiluba.

Scott, el vicepresidente zambiano, también ha sido objeto de las críticas [en] de Sata:

Tú, como vicepresidente, estás a cargo de este lugar, ¿por qué las flores y la hierba se están marchitando y por qué no hay agua? Tú también Roland Msiska, ¿por qué está la hierba en este terrible estado?

En otro acto Sata amonestó públicamente a su vicepresidente por mandar a un viceministro fuera del país para presidir el acto organizado por una compañía que importa coches de segunda. Sata dijo [en]:

“Mandaste a tu viceministro a glorificar coches de segunda mano. El discurso que tu viceministro leyó era tuyo. ¿Por qué deberíamos glorificar los coches de segunda mano? ¿Y dices que tenemos un vicepresidente?”