Teresita Fernández. Foto tomada de la página de Facebook dedicada a la cantautora.

Decenas de personas inundaron la plaza habanera de San Francisco de Asís para recordar a Teresita Fernández, una de las más conocidas cantautoras cubanas de la música infantil quien falleció recientemente en La Habana a los 83 años. 

La convocatoria fue lanzada en Facebook por Liliam Marrero, periodista y profesora de la Facultad de

Niños y niñas de Cuba cantan por Teresita. (Foto: KMLV usada con permiso)

Comunicación de la Universidad de La Habana, y difundida rápidamente en el grupo Canta Teresita. La espontaneidad de la cita el pasado domingo 17 de noviembre, concebida sin orientaciones de organizaciones políticas o de masas, desconcertó a varios participantes.

En su blog El Microwave, Rafael González, autor de Global Voices, enfatizó:

La gente se unió sin convocatorias de factores, y regaló una tanda de rondas a Teresita con la única recompensa de sentirse un poco niño otra vez (…) Siguiendo un anuncio lanzado desde las redes sociales, y a pesar de no contar con ningún otro mecanismo de difusión que no fuera Internet y el boca a boca, la gente convenció a otros amigos de ir, imprimió las letras de las canciones, llevó guitarras, cantó Lo feo y Pitusa y Eusebio, se dio de la mano y danzó una y otra vez.

Por su parte, en El Taburete, el trovador Fidel Díaz compartía:

Ronda por Teresita Fernández (Foto: KMLV)

¿Dónde estará en realidad Teresita? Me preguntaba este domingo en la mañana cuando salía hacia la Plaza de San Francisco de Asís, citado por esa red de soñadores, tejida a raíz de la triste noticia.  ¿Adónde habrá partido ese ser tan especial que declaró ser: Maestra ambulante, juglar, pobre, y libre? Si fuera por su gusto se iría una temporada a Betania, la casa de María Magdalena, donde Cristo descansaba. Así, confundido, llegué a la Plaza con su Iglesia y sus palomas.

Para Alejandro Ulloa, autor de Esquinas, la relación con la cantautora estaba estrechamente vinculada con una historia de amor.

Y enamoré a esta mujer con sus canciones. Recuerdo que “Pitusa y Eusebio” era una de nuestras preferidas, sobre todo para decirnos “muchísimo te quiero yo”. Y así incluíamos otras como “Lo feo”, para ella decirme que era linda y yo “no tanto”.

Según Rafael González, la velada fue «una mañana mágica y extraña, cargada de la poesía entrañable de las cosas sencillas, tal y cómo le gustaban a Teresita Fernández. Una mañana de juglares improvisados, de rondas concéntricas, de infancia feliz, de amor compartido, como una flor, y nada más».

Convocatoria de Una ronda para Teresita

Desde Youtube, varios usuarios compartieron videos de la ronda. Otras iniciativas convocadas desde las redes sociales en Cuba han sido el encuentro de tuiteros cubanos y la iniciativa ecológica Twittsaneo.