Tailandia: Reacción de los internautas a la victoria de la oposición

La candidata de la oposición Yingluck Shinawatra se convertirá en la primera mujer en ser Primer Ministro, ya que su partido Pheu Thai consiguió [en] más de 260 bancas en las elecciones generales del 3 de julio. Yingluck es la hermana menor del depuesto Primer Ministro Thaksin Shinawatra. El actual Primer Ministro Abhisit Vejjajiva [en] ya ha reconocido su derrota en la televisión nacional.

Las elecciones fueron narradas en vivo en los blogs de Newley Purnell [en], Siam Voices [en], Bangkok Pundit [en], y Khi Kwai [en]. Los internautas tailandeses usaron la etiqueta #thaielection para seguir de cerca los informes y resultados [en] de las elecciones. Richard Barrow publicó fotos de las elecciones en Posterous y Facebook.

Estas son algunas reacciones en Twitter:

@lollylollz: No digo que estoy de acuerdo con los resultados, solo que es la decisión de la gente – ¿no deberíamos aceptarla y seguir adelante?

@vahncitis: @gun_zlinger: Ustedes se merecían el karma que ustedes, en su mayoría, han creado #ThaiElection < <Si, vamos a disfrutar este buen karma…

@georgebkk: RT @notThanongK: Recuerden gente, no es la victoria lo que cuenta, sino desarmarlos luego.

@poobist: RT @pisa_fye: ¡¡Nuestros representantes necesitan un nuevo equipo de guionistas y un curso de oratoria ya mismo!!

@sarendra: Es momento que los políticos #tailandeses sanen y sigan adelante. Es tiempo que el Rey y el ejercito dejen de entrometerse. #Tailandia sonre:)rá nuevamente.

Yingluck Shinawatra

Yingluck Shinawatra

Thaksin fue derrocado por un golpe en 2006. Ahora está exiliado para evitar ser detenido por una condena por corrupción. Newley Purnell tiene curiosidad sobre el destino [en] de Thaksin ahora que su partido ha ganado en la votación.

Ha habido mucha discusión, en el pasado, sobre si el ejército aceptará o no otro gobierno amistoso con Thaksin.

Los expertos en política tailandesa, en las discusiones de TV de esta noche, se han referido a la amnistía para Thaksin como un fracaso.

No se puede saber qué va a suceder, dijeron, si el billonario exiliado regresa a Tailandia.

¿Pero realmente impulsaría la amnistía el partido Pheu Thai?

Tendremos que ver qué sucederá en las semanas siguientes.

Siam Voices reflexiona sobre las lecciones [en] de la reciente campaña electoral y los desafíos que enfrentará el nuevo gobierno:

Lo más probable es que tengamos una mujer como Primer Ministro; la oposición (tanto parlamentaria como extra-parlamentaria) tiene razones para celebrar; en el Partido Demócrata han apostado con sus campañas negativas y acaban de perder, mientras que Yingluck ha ganado no sólo a causa de su hermano exiliado, sino que también gracias a su enfoque más suave;  eso de que ser directo y enojarse por ser el segundo te llevará a algún lado son puras mentiras, y deberíamos tener cuidado de no ser engañados por los números ostentosos…

Lo que importa ahora es cuáles son las prioridades del gobierno y cómo maneja las distintas crisis que el país está enfrentando – ¿cómo van a abordar el aumento de los precios de los alimentos? ¿Intentarán la reconciliación, incluso a costas de la justicia? ¿Qué tan libre estará el Primer Ministro de influencias externas a las instituciones democráticas? Finalmente: ¿será oída la voluntad del pueblo?

Andrew Walker y Nicholas Farrelly, escribiendo para el New Mandala, esperan que Tailandia pueda reconstruir [en] su confianza en los procesos electoral y democrático:

El resultado de esta noche es un notable retorno al poder para una fuerza política que se vio expulsada a punta de pistola en la noche del 19 de septiembre de 2006. En los años que siguieron desde entonces ha sido constantemente interrumpida por intervenciones monárquicas, militares y judiciales. Con más de 100 de sus figuras principales expulsadas de la política, Phaua Thai ha conseguido sólidamente derrotar lo mejor que el venerable Partido Democrático puede arrojarle.

Tailandia ahora tiene una oportunidad para comenzar a reconstruir la fe en el proceso electoral. Sería una tragedia nacional si la oportunidad fuera desaprovechada.

Un votante muestra su voto. Foto de la página de Posterous de Richard Barrow

Oneditorial pudo votar desde otro país [en]:

Para mi, no importa si gana o no el partido por el que voté. Yo sólo quería expresar mi derecho democrático de una vez. Si el partido que no me agrada gana las elecciones, voy a felicitarlos sinceramente. Todos deberían aceptar los resultados, aunque los aprueben o no; de otro modo el país volverá al mismo ciclo caótico de Amarillo y Rojo. A nadie le gustan los políticos corruptos. Pero para abordar este problema, todos deberían aceptar que se tiene que hacer dentro de un proceso democrático.

Los grupos Amarillo y Rojo mencionados se refieren a los manifestantes Amarillos [en] que organizaron la toma de un aeropuerto en 2008; mientras que los Camisas Rojas son manifestantes anti-Abhisit que organizaron las barricadas de Bangkok el año pasado.

Robert Amsterdam, un partidario de los Camisas Rojas, identifica las dificultades [en] encontradas por la oposición:

El resultado de las elecciones es aun más impresionante si consideramos las posibilidades a las que se enfrentaba Pheu Thai. Incluso con el apoyo total del estado, la asistencia del ejercito, la privación de derechos de cientos de miles de votantes, el control de los medios, el encarcelamiento de nuestros candidatos, y la descalificación de docenas de nuestros líderes políticos, los demócratas no eran rival para un partido, y un movimiento, que ha inspirado y empoderado a millones de ciudadanos tailandeses.

Las elecciones fueron en general pacíficas a pesar que se encontraron algunos problemas como la falta de nombres de votantes, papeletas [en] arruinadas y descalificadas, largas colas en los centros de votación, y acusaciones de ilegalidad en las campañas.

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.